En Mayo de 1973 llegaba a las salas norteamericanas Batalla por el Planeta de los Simios, la última secuela originada por la película dirigida por Franklin J. Schaffner. Después de cuatro continuaciones, el fin de la saga fílmica estaba ya definido. La frase que acompañaba al cartel publicitario no dejaba duda alguna. En él podía leerse: . El inesperado éxito del film de J. Lee Thompson, obligó al productor Arthur P. Jacobs y a la 20th Century Fox a plantearse la posibilidad de seguir explotando el universo simio, aunque esta vez el futuro no estaría en las pantallas de los cines, sino en las de la televisión. Las excelentes recaudaciones que Battle for the Planet of the Apes había obtenido en taquilla habían venido acompañadas de los no menos estupendos resultados de audiencia obtenidos por la cadena CBS gracias al estreno de las anteriores películas de la saga en televisión. Esto animó a la Fox y a Jacobs a seguir contando historias del cosmos simio, pero esta vez no en los cines sino en la tele. Ya en 1971, el productor se había planteado la realización de una serie basada en las situaciones y personajes de los largometrajes, pero había desestimado de momento la idea al encontrarse muy ocupado produciendo otros films como Sueños de un seductor de Woody Allen, Adiós Mr. Chips o Las aventuras de Tom Sawyer. Durante la producción de esta última película, murió de un infarto a los 51 años. Tras su prematuro fallecimiento, la realización de la serie quedó en manos de la 20th Century Fox. Se contrató a los guionista Art Wallace y Anthony Wilson para que desarrollaran el argumento y las tramas de la serie. La historia que ambos guionistas escribieron fue más o menos ésta: